Fué una de las dos mujeres Caciques en la historia de los Indios Tainos, una mujer valiente, con destacada inteligencia y de gran atractivo físico.
Aceptó la llegada de los conquistadores españoles al sentir admiración por los conocimientos que estos traían y de los que ella se podia beneficiar, pero que tras los abusos, maltratos y vilolaciones de éstos sobre su población, decidió expulsar de sus tierras.
El Gobernador Nicolás de Ovando anunció una visita pacífica a la Cacique Anacaona, y recibido con una gran celebración por parte de los nativos, los españoles los traicionaron y quemaron la aldea, aniquilando la mayoría de nativos del poblado, aunque pudo escapar Anacaona.
Ella trató hasta el último momento de defender a su gente de los terribles abusos de los españoles, y intentó llegar a un acuerdo pacífico con estos, pero fué considerada como una amenaza, y tras ser capturada fué condenada a morir en la horca en acto público.
@ Jordi Gaya Gallofré.